El órgano se ubica en el coro alto, a la entrada del templo y frente al altar mayor, aunque probablemente fuera trasladado a este lugar procedente de otro punto de la iglesia, tal vez una tribuna lateral actualmente desaparecida.
Durante el proceso de restauración llevado a cabo en 2007 por los talleres de Joaquín Lois Cabello, de Tordesillas, se descubre en el encuentra localizado en el alma de uno de sus tubos una inscripción que certificaría la autoría del instrumento por parte de Joseph Corchado, en 1735. Se sabe también sobre intervenciones o reformas menores a lo largo de los siglos XIX y XX.
El instrumento lo conforma una caja exenta de estilo barroco ricamente decorada con tres cuerpos diferenciados. El cuerpo central acoge la mayor parte de la tubería vertical de su fachada frontal en cinco castillos compuestos por diferentes campos, teniendo los castillos pares un frontal cóncavo, y siendo el castillo central el que engloba los tubos de mayor calibre.
La lengüetería se distribuye en un nivel central en punta de lanza a dos filas y un tramo de menor a mayor en cada uno de los lados.
En la parte superior de la caja destaca el cuerpo superior o ático, elegántemente decorado, donde se recogen tres castillos de tubos.
En el cuerpo inferior, separado del conjunto central por la lengüetería anteriormente descrita, se instala la consola en ventana y las puertas frontales de acceso al mueble, aunque también es posible acceder al interior del mismo a través de unas puertas en su parte trasera. La consola se compone de un teclado doble con teclas decoradas en dominó, así como una línea de lenguas para contras y un pedal de ecos. Los tiradores para cambio de registro se localizan a ambos lados de dicha consola.
El instrumento se compone de un órgano mayor y otro de cadereta interior.
Tanto la transmisión del teclado como la de cambio de registros son mecánicas.
Hay que destacar que la tubería que se conserva se corresponde prácticamente en su totalidad con la original del instrumento.
El sistema actual de doble fuelle es obra de su última restauración, siendo alimentado con una bomba eléctrica.
La referida restauración, realizada casi en su totalidad con sus elementos originales, ha supuesto que el instrumento goce de una total operatividad y uso impecable en la liturgia y en cualquier evento musical.